El inicio parece augurar un partido relativamente tranquilo

TRITONES- XV Hortaleza Rojo
15 de marzo de 2015

Penúltima jornada de la segunda fase de la liga de este año. Repetimos en Torrejón y recibimos al segundo equipo de Hortaleza. Con el regusto agridulce que nos dejó el empate de la semana pasada, los chicos se conjuran para mejorar el rendimiento.

En el vestuario recordamos los aspectos del último partido que debemos cambiar y con esas consignas saltan al campo, en una mañana bastante desapacible y ventosa.

El inicio parece augurar un partido relativamente tranquilo, pero no somos capaces de evitar entrar muy fríos. De nuevo, una serie de errores concatenados (fallos en el manejo del balón, incapacidad de parar el avance del contrario con placajes efectivos,…..) lleva el balón claro hacia la demarcación del ala abierto de Hortaleza quien, después de una larga cabalgada desde su campo, ensaya cerca de los palos. Con la consiguiente transformación empezamos como siempre 0-7.

Afortunadamente, los chicos se habían preparado mentalmente y pronto empezaron a poner remedio. Nuestra potente delantera despertó e invadió la zona de 22 metros del contrario una y otra vez. Fruto de este asedio se consiguieron cinco ensayos finalizando con solvencia largas fases de ataques que incluían robos de balón, rucks, mauls, aperturas a la línea para abrir el campo, reorganizar y relanzar las fases de delantera.

La excepción al guión fue el último ensayo de la primera parte. La delantera consigue un balón justo antes de la línea de 10 metros de nuestro campo, se abre el juego a la línea de tres cuartos. Avanzando, mientras el balón fue jugado por casi toda la línea, llegó este a nuestro ala, quien corriendo hacia el banderín desbordó a varios contrarios y, cuando ya no le quedaba campo, pisó hacia dentro y logró un espectacular ensayo bajo palos. Nuestro pateador estuvo acertado y transformó cinco de los seis ensayos.

No sólo fue brillante el ataque. El trabajo defensivo se vio reflejado en una jugada en la que los de negro estuvieron lanzando ataques sobre la línea de nuestros cinco metros a lo largo de seis interminables minutos. No consiguieron pasar, a pesar de que hubo momentos muy difíciles y decisiones poco acertadas en algún momento. Para quien se quiera hacer una idea que vea la defensa de Gales sobre Irlanda, este mismo sábado.

Min 5: 0-7 Min 10: 7-7 (Mario) Min 16: 14-7 (Edu) Min 18: 21-7 (Bala)
Min 41: 28-7 (Arquero) Min 50: 35-7 (Óscar) Min 60: 40-7 (Gio)

Lo bueno: Muchas cosas: a saber, infinidad de recuperaciones del balón, melés rotundas que no dieron opción al rival en ningún momento (lástima que solo se pueda empujar 1,5 metros), buen desempeño en la touches, trabajo incansable en las fases defensivas, toma de decisiones con un buen porcentaje de acierto y, sobre todo, el espíritu de equipo que impera.

Lo mejorable: Especialmente la precipitación. Después de haber hecho la parte más difícil nos sobreviene un cierto desorden y/o relajación que, en ocasiones, echa por tierra el trabajo realizado. Después de ganar los rucks hay que tener control absoluto del balón y, a veces, no lo hacemos; tener en mente todas las condiciones que influyen en el partido para poder tomar decisiones correctas (meteorología, juego del rival, situación en el campo, características de los compañeros disponibles, …….).
Y, por supuesto, un mejor conocimiento del reglamento.

Después de esto, nos queda un partido que debemos ganar para asegurar la posición en la tabla clasificatoria (esto es lo menos importante) y para apuntalar nuestro buen juego y estado de ánimo. Más tarde, ya veremos, la copa.