Porque no descubrí antes el rugby
«¡Dios porque no descubrí antes el rugby!» exclamó uno de nuestros jugadores el pasado domingo mientras abandonaba el Complejo Deportivo del Valle de Las Cañas. Era un grito emocionado, feliz. Por el resultado del partido, por lo bien que se lo había pasado, por el buen Tercer Tiempo que había disfrutado y por el buen rollo con los compañeros. Un grito al sol de satisfacción.
El madrugón mereció la pena. Aunque hacia frío el sol brillaba radiante y la casi ausencia de viento hacía la mañana muy agradable. Puntuales llegaron los jugadores a Pozuelo, con cara de sueño y con una convocatoria corta, solo 17 jugadores. Tras un buen calentamiento para ajustar a los jugadores a sus posiciones y con algo de retraso, que vino bien para pulir cosas, comenzó el partido.
Los cinco primeros minutos dominamos el balón, con muchas imprecisiones. Se nos caían los balones de las manos con mucha facilidad. Afortunadamente no tardábamos mucho en recuperarlo. El juego era un rosario de melés a favor de uno y otro equipo. No se terminaban de hilvanar bien las jugadas. Se movía el balón pero éste acababa pronto en el suelo. En el minuto seis tras un golpe de castigo el balón llego a ‘Killer’ que se lanzó hacia la zona de marca rival consiguiendo el primer ensayo, 0-5.
Si a los nuestros se les caían los balones, los jugadores de Olímpico no querían ser menos. Pero tras nuestro ensayo reaccionaron y nos encerraron en nuestra 22. Les costó romper nuestra defensa pero en el minuto 11 consiguieron empatar el partido. Vuelta otra vez al rosario de melés, apenas había continuidad en el juego por los errores de unos y de otros. Errores muchas veces no forzados. Mediada la primera parte una buena contra de Antequera por el ala nos ponía de nuevo por delante, 5-10 . Pero poco después teníamos que prescindir de nuestro talonador. Mareado salía del campo y hubo que recomponer la melé. Y el reajuste tardó lo suyo, generó algunas tensiones y casi nos hace salirnos del partido. Esos instantes de desconcierto y falta de conjunción los aprovechó Olímpico para empatar. Así llegamos al descanso.
Nos vino bien porque conseguimos apaciguar los ánimos y meter a los chicos otra vez en el partido. La segunda parte fue más intensa que la primera. Olímpico sacó a sus suplentes y nosotros veíamos con preocupación que solo nos quedaba uno. Había que aguantar lo máximo posible y luchar hasta el final. Y los dos equipos lo hicieron. Olímpico se puso por primera vez por delante en el minuto 38. Pero nuestra línea de tres cuartos empezó a funcionar, a encontrar los huecos y aprovechar la salida de melés y los rucks para atacar el espacio e intentar llevar el balón a la zona de marca rival.
Primero lo consiguió Jacobo, 15-17. Olímpico tras varias fases rompía en el minuto 50 nuestra línea, 22-17. Dos ensayos consecutivos de Mateo y Killer de similar factura nos ponen por delante. Posesión del balón en el centro de la cancha, se mueve el balón y se encuentran los huecos para atacar y ensayar bajo palos, 22-31. Quedaban cuatro minutos para defender el resultado. Cuatro minutos intensos, con Olímpico encerrándonos en nuestra 22 y nosotros defendiéndonos como gato panza arriba. Marcaron su último ensayo en el último minuto. 29-31. Fue tan ajustado el marcador que unos y otros dudaban de quien había ganado el partido.
Una victoria luchada, después de un partido con muchas imprecisiones y algunos buenos detalles para acabar un gran fin de semana de la Academia. Segundo triunfo como visitante y ahora dos semanas para preparar el próximo partido, recuperar jugadores y seguir trabajando para llevar al equipo lo más alto posible.
En este partido jugaron: Marco, Manu, Liroz en la primera línea; Pablo ‘Koala’ y Rafa, segundas; terceras Alex, Aaron y ‘Killer’; David y Mateo medios; Jacobo y Ramón centros; Victor, Quique y Antequera alas y zaguero. En la banda Mcnally sustituyó a Manu por lesión y Pablo ‘Rakitic’ que dado lo incierto del resultado no tuvo ocasión de participar pero ayudó en todo momento.
Sangre y Cielo. Aúpa San Isiiii!!!!!!!
Miguel Ángel Plaza, delegado
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