Han venido a pasarlo bien, por eso son héroes…
«El sentido de una epopeya, es decir, el gran poema épico que canta las acciones valerosas de los héroes que encabezan de sus pueblos y países»
No puedes mejorar o tener éxito si sólo entrenas los días que te apetece. Los días difíciles son los que marcan la diferencia.
Una gran mañana soleada, 12 grados, viento suave, en el Olimpo de los dioses, Orcasitas de arriba. Buena afluencia de público, destacando jóvenes promesas del primer equipo que no dejaron de animar a un gran San Isidro Old Lizard B en su batalla contra el reforzado CAU B.
Convocatoria: San Isidro B OL, 20 jugadores, CAU 23 jugadores.
Si para nosotros la victoria hubiera sido importante, para nuestro adversario fue épica a juzgar por las fotos de equipo y los abrazos y vítores desaforados manifestados por sus aficionados.
Comenzaba el partido con un ritmo endiablado que tomó al adversario de sorpresa, los viejos lagartos enlazaban pases, quiebros y juego maravilloso que culminó con una contundente entrada a la zona de marca por parte de Pumuki marcando el 5-0 inicial. El juego continuó con claro dominio sanisidril que culminó con ensayo de Rodrigo, Eugenio transformó y el marcador se ponía en 12-0. El colegiado pitó un golpe y Eugenio no dudó en pasar el oval por el centro de la H, 15-0.
Hasta este momento habíamos tenido la posesión de balón en todo momento. Pero la rapidez de su zaguero acortó el resulta 15-5. En otra jugada suya de delantera plantaron el balón sus marcando otro ensayo 15-10.
El clásico dúo Peris – Sorín culminaron una jugada maestra que terminó en un drop magistral, 18-10 al término de la primera parte.
La grada se aprovisionó de refrigerios dispuestos a ver la segunda parte. Desgraciadamente el CAU se puso las pilas y salieron muy motivados. A los pocos minutos los morados nos marcaron un ensayo de delantera con transformación. 18-17.
La experiencia del fracaso es el invisible trofeo de los valientes y los ganadores.
Los viejos lagartos empezaron a hacer infinidad de golpes lo que nos perjudicaban ya que el rival se aprovechaba de esta circunstancia ensayando 18-25.
Creo que la forma física también nos pasó factura. Muchos fallos de handling y poco control en general nos llevaron a una segunda parte muy distinta a la primera. 18-30.
Hay que reconocer que el equipo se dejo todo en el campo y para corroborar este aspecto Esteban posó el balón y transformó Eugenio, 25-30, fin del partido. Nunca se sabe si hubiésemos seguido 10 minutos mas si el resultado hubiese sido favorable.
Esta vez habíamos avisado a La terraza y pudimos degustas varias tortillas, macarrones y pollo guisado bien regado con dos barriles de cerveza fresquita.
Jugaron: Podesta, Javier, Francisco, Isma, Iñaki, Tala, Esteban, Miguel, Peris ©, Eugenio, Antonio, Sorín, Pumuki, Rodrigo, Carlos, German, Luis, Mario, Ferreiro, Job.
Delegado: Plaza
Entrenador: Diego
Eero Mannes – Great Old Lizard (nº 4)
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