Derrota dolorosísima

El partido del domingo ha dejado cicatrices de todo tipo. Derrota dolorosísima. Entre otras cosas por los lesionados, por orden cronológico: Miguelón (rotura muscular), Sergio (ídem), Álvaro Macanan (luxación de dedo y brecha en cabeza), Álvaro Morán (contusión en hombro, de tanto placar), José Andrés (contusión en espalda), Francis Guimezap (contusión cervical)… En fin a las muestras me remito.

Empieza el partido con nuestro habitual trabajo de delantera y ensayamos en el minuto 8 (sin transformar). En el 11 nos empatan haciendo gala de su mejor baza la rapidez en la transmisión y relanzando en transformación directa (sin esperar a ruck o maul) yendo muy rápido hasta el ala. Nuestra línea consigue defender eficazmente en primera cortina, o con el apoyo de alas y zaguero.

En el minuto 34 ensayan y en el 38 empatamos. Cada equipo explotando sus virtudes y la debilidad del rival. Quizá nosotros pecamos más que ellos de falta de alternativas en el juego. La línea defendió pero casi no participó en la ofensiva, lo que nos hizo ser más previsibles.

En honor a la justicia, además, su delantera estuvo bien. No dominamos la melé como en otras ocasiones, aunque tampoco fuimos dominados (empate mientras estuvimos 15 contra 15 e incluso siendo 14 contra 15). La touche muy bien, casi ni la disputaban.

En el minuto 26, rigurosa amarilla a Canche al incorporarse a un ruck por el lateral.

Esta fase del partido (finales de la primera parte) fue vibrante, una lucha de delanteras, un juego desplegado que tratábamos de taponar con bastante éxito. Espadas en todo lo alto cuando sonó el pitido de la mitad.

Todo se fue al carajo en el minuto 5 del reinicio: tras maniobra sucia del Tasman (mordisco a Álvaro Macanan cuando este pescaba un balón tras placaje) pegamos y nos expulsan definitivamente a Álvaro (encima herido por los pisotones del Tasman) y a su hermano Jose con amarilla.

Tras este tsunami tratamos de reorganizarnos pero fue casi imposible conseguir parar los ataques por el ala que en varia ocasiones (4) nos machacaron.

Aún sí la casta de este equipo es rotunda: ni un ápice de bajar la cabeza, agresividad hasta el final (para ejemplo el modo en que limpió un ruck Ptin en el minuto 70), y ensayo en el 58 buscando el bonus defensivo que no pudimos alcanzar por el tiempo.

Un abrazo amigos, a restañar las heridas y a disfrutar del mucho rugby que nos espera en la segunda vuelta.